miércoles, 12 de noviembre de 2008

Aun pienso en ella.

Para que negar que ella tiene la llave de mi pensamiento y sin darse cuenta se introduce en mi mente. No puedo dejar de pensar en ella, su olvido es mi infierno. Estoy encerrado en un círculo de ansiedad donde la soledad es la única salida, no me he acostumbrado a estar sin ella, todavía la siento dentro de mí. Mis manos son el único desahogo de esta agonía que me está quemando dentro de mí.
Porque no puedo desaparecerla fácilmente así como llego, quisiera serrar los ojos y al abrirlos que ella ya no existiese más en mi mente y en mi corazón. ¿Por qué esta agonía? ¿Porque este sufrir? Porque tuve que ser yo quien se enamoro, ¿Por qué?
Quisiera ya no pensar en ella, he vuelto a ser fuerte, duro, frio como antes de que ella llegara a mi vida pero no he dejado de sentir lo que sentí cuando ella se fue. Todavía existe en mi, cierro los ojos y aparece en mis sueños. Extraño sus labios y no me atrevo a probar otros hasta ya no sentir nada por ella, no sé si la amo ¿Por qué? Todavía lo siento. He encontrado sus cartas, y no he podido resistirme a leerlas, surgió algo dentro de mí que la necesitaba, llegue a tener ganas de abrasarla, besarla y decirle todo lo que mi corazón grita en silencio, serré los ojos y la imagine y surgió un lagrima sellando el momento inolvidable que había recordado. Todavía existe en mi ¿existiré yo en ella? No lo creo, sus ojos, su cuerpo, su sonrisa, su mirada y su corazón ya tienen dueño. No estoy seguro pero es lo que creo, se como es ella.
Me retiro para tratar de hacer lo que ella ha logrado.

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